martes, 26 de enero de 2010

¿Dedicado a él? ¿Sí? Al menos así decía...

Una noche más de esas en las cuales quiero quedarme hasta tarde viendo TV esperando que ésta con su luz y sus programas repetidos me arrolle. Cándido. Envidiable.

Hace ya varios días que vengo desarrollando una serie de síndrome que una página (web) de salud bautizó el síndrome de quedarse en casa con pijamas. Sospecho que no es nada nuevo, por el contrario, muy antiguo, pero la verdad no quiero tomarme la molestia de conocer el tiempo de vida de este síndrome. Lo importante aquí es el porqué de mi desvelo, de mi no querer dormir, porque el sueño ya lo recuperé hace ya varios días, pero aun así me resisto a dormir. ¿Quieren saber que es? Tengo una idea no muy clara en mi cabeza, semilla de la discordia plantada por un amigo novato. Una idea que de no haber sido planteada por este amigo, no la habría ni considerado; jamás hubiera cruzado por mi mente dicho pensamiento. Pero bueno, las cosas ya están hechas y por algo ha de ser. No creo desvelarme por las puras. ¿Total? Nunca fue en vano.

 
I didn't hear you leave
I wonder how am I still here
And I don't want to move a thing
It might change my memory

Oh I am what I am
I'll do what I want
But I can't hide
I won't go
I won't sleep
I can't breathe
Until you're resting here with me

I won't leave
I can't hide
I cannot be
Until you're resting here with me

I don't want to call my friends
They might wake me from this dream
And I can't leave this bed
Risk forgetting all that's been

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