jueves, 21 de enero de 2010

¿Adicción, compulsión o una mala relación?

¿Nunca han pensado que pasan demasiado tiempo en el computador? Yo sí. Pero no lo dejo. Como todo vicio crea cierto grado de dependencia. En mi caso, prendo la computadora apenas despierto y casi paso todo el día sentada frente a ella, si es que no tengo algo más por hacer. Eso sí, no he llegado al extremo de dejar mi vida social por la vida en el internet. Pero como mencioné en mi post anterior, parte de mis monótonas tardes, y porqué no decirlo: mis monótonos días (porque hasta ese punto he llegado) incluyen depender de mis tan queridas redes sociales.

Pero leyendo informes sobre esta "supuesta" adicción al mundo de la red, -y digo supuesta porque existen clínicamente series dudas sobre su diagnóstico como adicción o como comportamiento compulsivo 
(www.sindominio.net/biblioweb/escepticos/adiccion.html) -leí una frase más de las tantas señales que he recibido en el día sobre una acción que debo realizar y que he pospuesto ya hace mucho por cobardía. Sí, cobardía. La frase decía: "Lo importante en la adicción no es la actividad  que genera la dependencia, sino la relación que se establece con ella. Es una relación negativa, incluso destructiva que el sujeto se muestra incapaz de controlar". No diré más.

Según esto, entonces tengo un problema en cuanto a las relaciones que creo, y el problema no proviene de elementos ajenos a mi, sino directamente de mi, creadora de dichas relaciones. Es curioso saberlo, porque por primera vez que asumo que la raíz del problema no está en mí, y resulta que esta vez sí lo es. Irónico. "Creas relaciones imaginarias para evitar enfrentar la realidad" fue otra de las frases que me lanzaron por la mañana mirando una comedia por la televisión; medité al respecto y me dije a mi misma: asumir la conducta post-decisión es casi equivalente a haber ejecutado la postura de la decisión. Cambié de canal y Lenny Kravitz me cantaba: "So many years we've tried/ and kept our love alive/ 'cause baby it ain't over 'til it's over" ...Sentencia confirmada, no es lo mismo.

Pero aún así me mantengo en mi cobardía, porque tengo miedo de lastimar a alguien, y mucho. Como se ha hecho en algunos casos, es mejor que el moribundo muera engañado, pero feliz, y que todos colaboremos en ser parte de esa bella mentira. "Va a morir, es lo menos que puedes hacer, cooperar"... ¿será verdad? No lo sé, ya tengo mis propias dudas sobre la muerte como para añadirle una pregunta más.



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